lunes, 30 de julio de 2012

Política 2.0

   Ya hace tiempo publiqué un artículo en el que trataba de dejar clara mi posición frente a las medidas que está tomando el gobierno para resolver la situación económica que atraviesa el país.

No voy a negar que no sea necesario ajustar la economía, pero la verdad es que no me salen las cuentas.
Estoy viendo recortes en educación, sanidad, justicia... pero sin embargo no veo que se tomen medidas como deshacerse de todos los privilegios que poseen los gobernantes, y el vergonzoso número de políticos de segunda que les rodean.

No se que pensar del número de embajadas autonómicas que hay repartidas pro todo el mundo. Autonómicas! y yo creyendo que el espíritu de independentismo autonómico era exclusivo de un grupo reducido de fanáticos.


Antes de recortar en campos tan básicos para la sociedad como la educación y la sanidad, creo que habría que eliminar gastos superfluos (quizá la educación es algo no solo innecesario, sino incluso molesto para aquellos que prefieren dirigir un país de borregos).

Reducción de la prestación por desempleo. Curioso que una persona que ha estado trabajando unos pocos de años, y en contra de su voluntad se queda sin trabajo, tenía 2 años de ayuda económica, ahora muy reducida. Sin embargo, vemos a políticos que con unos años (4) tienes sueldos de por vida, y no hablamos precisamente de sueldos bajos. Por supuesto, eso no significa que no puedan trabajar en otras cosas y cobrar otros sueldos.

Pero podemos seguir, con el tema del SICAV, instrumento financiero que permite invertir dinero y diferir el pago anual de impuestos, (del mismo modo que ocurre con los fondos de inversión), pero en este caso a través de la creación de una sociedad anónima cuyo objeto social es invertir en activos financieros. Mediante este instrumento los accionistas de la sicav tributan por las plusvalías una vez materialicen estas, repartiendo dividendos o vendiendo las acciones de la sicav con plusvalías al tipo establecido para las rentas de capital en España. Gozan de las mismas ventajas fiscales que los fondos de inversión con una tributación (en 2011) del 1%. Sinceramente, estas cosas me indignan.

Ya del Senado ni hablamos. En las últimas elecciones no se tenía ni que haber votado. Se tenía que haber eliminado directamente.

No se cuanto se ahorraría el país con estas medidas (quitar embajadas autonómicas, centralizar la administración autonómica, eliminar privilegios de políticos, como dietas, coches, etc, eliminar la Sicav, disolver el Senado, eliminar esos sueldos vitalícios...). Pero lo que a mi nadie me puede quitar de la cabeza, es que si tan mal estamos económicamente, habría que recortar de todos lados, no solo de donde interesa.

Hasta pronto.